Este lema que utiliza un nuevo partido político en España, es una copia de lo que le dio el triunfo al actual presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, que utilizó el “Yes, we can”. Pero que nosotros en el IICOP lo utilizamos prácticamente a diario, cuando vienen pacientes con enfermedades que afectan a los miembros inferiores, a los tobillos y a los pies. También en aquellas personas que sufren traumatismos, muchos de ellos muy graves. Pasan por distintas manos, hospitales públicos o centros privados donde los tratamientos que reciben no son los adecuados, se les inmoviliza las fracturas de una forma precaria, en mala posición, se les trata las heridas de forma poco adecuada o bien se les dice que no existe tratamiento y que se tienen que aguantar.
Cuando ves esto, te das cuenta como se les trata a los pacientes con procedimientos que muchas veces están avocados al fracaso. Si alguna vez hablas con ellos la contestación es casi siempre la misma “Hacemos lo que podemos”. ¿Realmente creéis que esto es lo mejor para tratar un problema grave? o sería mejor que dijeran: Nosotros no podemos tratar este problema, porque nos desborda y no tenemos la experiencia suficiente, por lo que les aconsejamos que busquen otro sitio donde se lo puedan resolver.
Esto que sería lo lógico, lo hace solo un pequeñísima parte de los facultativos. Por eso muchos pacientes cuando vienen al IICOP, te dicen siempre la misma frase “si les hubiera conocido antes, no hubiera perdido tantos meses para curarme”. Bueno nosotros no curamos todos los casos, pero si muchos de esos que en teoría no se podía hacer nada más.
Pues este es el caso de la paciente que ha venido de Galicia, con una tremenda fractura de pilón tibial ocurrida hace más de 4 meses y que presentaba el lamentable estado que podéis ver en la foto. La fractura abierta había lesionado seriamente la piel, pero dejaron que esta curara, después de suturarla, pero que al cabo de este tiempo se transformó en una pura cicatriz, sin movilidad alguna. La fijación externa que le pusieron, estaba mal colocada, ya que uno de los clavos lo pusieron en el pie justo por donde pasan la arteria y el nervio tibial posterior, por supuesto que la fractura de la tibia estaba sin reducir y la del peroné mal reducida. Consultaron en hospitales públicos y privados como uno de la Iglesia en la ciudad de Pamplona donde solo le ofrecían fijarle el tobillo. Cuando ellos me preguntaron si podíamos curar esta lesión y devolver el movimiento al tobillo, mi respuesta fue: ¡Si se Puede! o Yes we can. Haríamos lo mismo que hemos hecho con otros pacientes que tenían situaciones similares, recordad un post publicado en Julio que se llamaba : El tesón, el esfuerzo y el conocimiento nos ha llevado a poner un punto final Feliz en un caso de fractura de pilón tibial infectada.
Esta paciente recibirá el mismo tratamiento que aplicamos en el paciente del post para tratar su fractura de pilón tibial, primero resolveremos la cobertura de la piel, retirando la infección, después reconstruiremos la tibia y para dentro de un año la colocaremos una prótesis de tobillo. Hace dos días hemos dado el primero paso, con la inestimable ayuda de los doctores Alek Lovic, Sergio Alvarez, Inma Moracia y yo mismo, se le ha limpiado toda la infección y se le ha colocado un injerto vascularizado del músculo dorsal ancho, además hemos retirado todos fragmentos de huesos que estaban sueltos y desvitalizados. Seguidamente se le ha puesto injerto de piel, terminando mediante la colocación de un nuevo fijador externo en forma de A y bien colocado para que nos mantenga la fractura bien alineada y estable.
Como veis si se puede hacer las cosas bien para iniciar la curación de este caso tan grave. ¡Si se puede! es un eslogan que nosotros llevamos utilizando durante muchos años, aunque ahora esté de moda.